El Comité Nacional de prevención del tabaquismo ha dirigido una carta a la ministra de Sanidad Ana Mato solicitando el apoyo del Gobierno de España a la Nueva Directiva Europea de los Productos del Tabaco (DPT) que se está discutiendo actualmente en el Parlamento Europeo y que persigue, entre otros objetivos, aumentar los mensajes disuasorios en las cajetillas o envoltorios y prohibir aditivos como el mentol o sabores como chocolate o vainilla. La finalidad de la Directiva, es unificar políticas a nivel europeo de producción y venta de tabaco con el objetivo de reducir el inicio al consumo de tabaco.
Tras su eventual aprobación por el Parlamento, la directiva deberá recibir también el visto bueno por parte del Consejo de la UE, en el que están representados todos sus estados miembro, por lo que no es previsible que pueda salir adelante antes de 2014.
No ...
... obstante, existe ya, a juicio del CNPT, una “campaña desatada” por parte de la industria y las asociaciones de productores para evitar que la norma vea la luz según las directrices actuales. Y las presiones no se quedan ahí, puesto que los gobiernos de cinco comunidades autónomas españolas (Cantabria, La Rioja, Extremadura, Navarra y Canarias) ya se han posicionado en contra.
Es justo esto último lo que más preocupa al Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT), que agrupa a más de 40 sociedades científicas y asociaciones profesionales del sector sanitario volcado en la lucha contra el tabaquismo. En concreto, en el CNPT creen que si la presión política alcanza al Gobierno central, se pondría en riesgo la aprobación de una directiva que, como se acaba de apuntar, ha de recibir el parabién tanto del Parlamento como de los países de la Unión.
Contenido de la norma
En la carta a la ministra solicitando que desoiga estas presiones y actúe de mediadora ante el Ejecutivo de la nación para que haga lo mismo, el CNPT señala que la promulgación de la nueva directiva supondrá un significativo paso adelante en la prevención y control del tabaquismo, y alude a algunas de sus virtudes, que en síntesis son las siguientes:
- Si hasta ahora las advertencias sanitarias sobre los efectos del consumo del tabaco ocupaban entre un 30% y un 50% de la superficie de cajetillas de cigarrillos y paquetes de tabaco de liar, en adelante ocuparán tres cuartos de la superficie de todas sus caras e incluirán imágenes y texto al mismo tiempo.
- La obligación de informar sobre el contenido de nicotina, alquitrán y monóxido de carbono será sustituida por un mensaje especificando que el humo de tabaco “contiene más de 70 sustancias que causan cáncer”.
- Se prohibirán los cigarrillos y el tabaco de liar con “aromas fuertes característicos”, como el mentol o la vainilla, así como los aditivos que aumenten la toxicidad y el potencial de adicción del tabaco. Los aromas no deberán ocultar el sabor del tabaco.
“La realidad es que si hubiera que comercializar ahora el tabaco por primera vez, no se permitiría, pues podemos saber lo que contiene una lata de tomate frito pero nadie sabe que contiene un paquete de cigarrillos salvo su contenido en alquitrán, nicotina o un gas mortal como el monóxido de carbono”, comenta el presidente del CNPT, el doctor Francisco Rodríguez Lozano.
En este sentido, la nueva directiva europea quiere regular los aditivos que se añaden al tabaco para hacerlo más adictivo o más atractivo al consumo. Los aditivos, como ha dicho el comisario Tonio Borg, pueden hacer que el tabaco no sepa a tabaco “sino a piña colada”… con tal de endulzar el peligroso veneno que lleva dentro.
Argumentos falaces en contra
El CNPT también ha hecho llegar a la ministra de Sanidad un documento, elaborado en colaboración con la sociedad científica europea Smoke Free Partnership, en el que se desmontan “uno por uno” todos los supuestos argumentos que se están barajando en contra de la directiva, como que la intensificación de las advertencias gráfica no disuaden el consumo.
“Del análisis sistemático de las pruebas se desprende que las advertencias sanitarias de los paquetes de tabaco son medidas efectivas para evitar que los jóvenes comiencen a fumar y para animar a los fumadores a que consideren abandonar el tabaco. Las advertencias gráficas y de texto que ocupan el 75% o más del espacio disponible son mucho más efectivas que las advertencias de texto únicamente que ocupan el 50% o menos, especialmente entre los jóvenes”, se indica en este documento, donde también se pones ejemplo extraídos de la práctica: En Bélgica, el volumen de llamadas al teléfono de ayuda para dejar de fumar aumentó en dos tercios el año en que se incluyeron advertencias gráficas en todas las cajetillas anunciándolo; y en Canadá, la introducción de similar iniciativa condujo también resultados positivos.
El CNPT recuerda a la ministra que la industria tabacalera no ha aportado pruebas convincentes a ninguno de los puntos sobre los que basa su plan de oposición, por lo que deduce que su intención no es otra que impedir “impedir y retrasar la implementación de medidas eficaces que contribuirán a reducir el consumo del tabaco” y, por tanto, dañarían sus cuentas de resultados.
La directiva es “crucial”, añade el CNPT, porque según los datos que baraja el propio comisario europeo de Salud Tonio Borg (encargado de llevar adelante y defender la directiva) logrará reducir el número de fumadores de la UE en 2,4 millones, generar 2 234 nuevos puestos de trabajo en total, inyectar a la economía 4.000 millones de euros y recortar en 506 millones de euros el gasto médico anual, además de ahorrar 16,8 millones de años de vida.
En consecuencia, los profesionales sanitarios españoles piden a la ministra que actúe en favor de una norma que “salvará millones de vidas ayudando a prevenir que los niños empiecen a fumar, animando a los fumadores a dejarlo y reduciendo la carga que nuestra sociedad tiene que pagar por su adicción al tabaco”.
Asimismo, el CNPT aprovecha la ocasión para manifestar su apoyo a la ministra por su declarada predisposición a mantener íntegra la actual Ley del Tabaco española.