Ideas para aprovecharse de la ley antitabaco
Testimonio de una hostelera responsable
No todos los hosteleros estamos en contra de la ley antitabaco. Yo llevaba años esperando que esto sucediera, esperando que esta ley nos hiciera a todos iguales independientemente de los metros que tuvieran nuestros locales. Esperando que llegara el momento en que no tuviera que poner toda la ropa que llevamos puesta en el trabajo a lavar cada día por lo insoportable del olor. Esperando poder dejar de ser fumador pasivo y sufrir sus consecuencias a lo largo de veinte años en mi puesto de trabajo solo por el hecho de dedicarme a la hostelería. Ahora ya no hay nubes de humo insalubres en nuestros bares, ahora cuando nuestros clientes comen un cocido huele a eso, a cocido, y cuando beben un buen vino se huelen muchas cosas, porque hay muchos olores y matices en los vinos que apenas se aprecia en un ambiente contaminado.
Entiendo que hay empresas a las que ha afectado negativamente esta ley (sobre todo los bares de copas o pequeñas cafeterías…) pero yo propongo un reciclaje del sector. Propongo unirnos, si, y luchar por nuestra supervivencia y nuestros negocios, pero en mi modesta opinión esa lucha no va en la dirección de fletar autobuses a Madrid a manifestarnos o en cerrar nuestros bares un día como protesta. Todo esto va a suponer un gasto que no va a obtener resultados. La ley difícilmente se va a cambiar porque ya ha sido aprobada por el Parlamento. Tenemos otras leyes con muchísimo más clamor social en contra que no lo han hecho (por ejemplo, la Ley del Menor, que ha conseguido reunir millones de firmas). Empleemos ese dinero y esa energía en algo que vaya a ser verdaderamente efectivo.
Se me ocurren muchas cosas que los hosteleros podríamos hacer.
A nivel institucional hay una cuestión de la que nadie habla y que a mí me parece fundamental para nuestra supervivencia: es exigir que nos ayuden en cuanto a la carga brutal que estamos soportando con los impuestos, en concreto con las retenciones de los trabajadores, que se han duplicado en este último año (sobre todo el último trimestre por los atrasos).
La subida del IVA ha disparado los precios de la materia prima, eso también nos ha afectado económicamente. Cualquier empresario sabe, por ejemplo, que las facturas del proveedor de verduras (uno de los productos que más ha subido) se han duplicado mientras nuestros ingresos siguen siendo los mismos o menores.
Es necesario invertir tiempo y dinero en ideas para el reciclaje del sector. Y ni siquiera mucho dinero. En épocas de crisis hay que agudizar el ingenio. Si tenemos un local que principalmente da cafés, desayunos, etc. podríamos contactar con el proveedor de café y que nos facilite hacer una degustación de cafés de diferentes sitios del mundo, que nuestros clientes elijan cual es el que más le ha gustado, darles una galletita o un trocito de bizcocho horneado por nosotros. Tener wi-fi gratuito también podría venir bien para entretener un poco mientras se conecta a internet con su teléfono, a ese cliente que está pensando en irse rápido a fumar. Una sonrisa también ayuda…
¿Por qué no hacer un día a la semana los pinchos a un euro? Por ejemplo, las noches de entre semana que hay menos afluencia. Una campaña de locales que quieran adherirse a este tipo de promoción podría ir acompañada de una cartilla que los clientes podrían ir sellando en los bares al consumir estos pinchos. Un premio o entrar en un sorteo para consumiciones podría ser el final de la promoción.
Los bares de copas, a pesar de que efectivamente tienen más complicado paliar el efecto del no tabaco, también pueden hacer cosas, como poner golosinas de tapa que ayuden a retrasar las ganas del cigarrito con la copa, o dedicar un poquito más de tiempo a cada cliente al prepararle su copa aromatizada, etc…
Si nuestro sector es el del turismo rural, u hotelitos pequeños, seria importantísimo ofrecer paquetes de fin de semana como están haciendo ya en muchos sitos fuera de Cantabria. Que incluya la noche del viernes, la del sábado, los desayunos puestos con gusto y cariño, una cena o una comida… y alguna visita turística, por ejemplo a una bodega de vino u orujo. Se puede negociar con la consejería de Turismo la posibilidad de entradas más económicas para sitios representativos de cada zona y poder ofertarlo en estos paquetes…
En la ribera del Duero, por 130€ por persona el fin de semana, te incluyen una visita a una bodega. Solo pongo un ejemplo, pero hay más y lo ideal sería crear nuestros propios paquetes y, por supuesto, la promoción a través de internet. Aquí si nos haría falta algo más que ingenio (inversión económica) para que los empresarios que no tienen página web puedan contar con esta herramienta fundamental para promocionar sus negocios.
Jornadas gastronómicas, presentaciones de vinos por parte de las bodegas en nuestros locales, maridajes, concursos, cenas temáticas, menús de grupos, vinos a buen precio, una tapita, tener en perfecto orden y limpieza nuestros locales, utilizar las redes sociales para dar a conocer nuestras ofertas, y un poquito de cariño y dedicación pueden ayudar y mucho a nuestro sector.
Y, sinceramente, no creo que el humo de los cigarrillos sea el que pueda ayudarnos.
Pilar Velarde Fernández, hostelera, propietaria de Bodegas La Montaña
Fuente: http://blogs.eldiariomontanes.es/opiniones/2011/3/9/ideas-aprovecharse-la-ley-antitabaco
El diario montañés