LA AMENAZA DEL HUMO DE TERCERA MANO
Ya se conocían los peligros del tabaco, tanto para fumadores activos como pasivos, pero un nuevo estudio revela que el humo que queda impregnado en los lugares donde se fuma también es nocivo para la salud.
Cuando se enciende un cigarrillo, la nicotina se libera en forma de humo que puede quedar depositado por meses en muros, alfombras, cortinas y muebles, según el estudio publicado en los Anales de la Academia de Ciencias estadounidense (PNAS, por sus siglas en inglés).
"Nuestro estudio revela que cuando esta nicotina residual reacciona con el ácido nitroso del ambiente forma nitrosaminas cancerígenas específicas del tabaco", explica Hugo Destaillats, uno de los autores del estudio.
Y estas nitrosaminas "son las cancerígenas más activas y potentes" asociadas al tabaco, subrayó. La exposición a estas nitrosaminas pasa generalmente por la inhalación de polvo o por el contacto de la piel con las alfombras, las cortinas o la ropa, lo que hace a los niños más vulnerables, agregó.
Fuente: Google Noticias (09/02/2010)